Emisiones de CO2 procedentes de la combustión de combustibles

Las emisiones de CO₂ crecieron un 1,7 % en 2023, de la mano de China e India.

Las emisiones de CO₂ alcanzaron un nuevo récord en 2023 (con un incremento del 1,7 %), ya que la menor disponibilidad de energía hidroeléctrica aumentó el consumo de carbón y, por tanto, las emisiones de CO₂ en China (5,3 %) y la India (7,2 %). Además, el repunte del transporte en China y de la aviación mundial contribuyó al aumento de las emisiones globales. Impulsadas por un crecimiento económico dinámico, las emisiones de CO₂ también aumentaron en Vietnam, Irán, México, Brasil y Rusia.
Por el contrario, una actividad industrial de uso intensivo de energía más débil y una mayor generación de energía renovable en la mayoría de los países de la OCDE contribuyeron a reducir las emisiones de CO₂ en EE. UU. (1,9 %, también debido a las temperaturas más suaves, que redujeron el consumo de energía). Estos factores, junto con un incremento en la generación de energía nuclear, contribuyeron además a reducir las emisiones en Europa (7,1 %), Japón (7 %) y Corea del Sur (4,1 %).
En general, desde 2010, las emisiones de CO₂ de los países del BRICS han aumentado entre un 46 % y un 49 % respecto de las emisiones globales, siendo China responsable de un tercio de las emisiones totales (con un incremento del 46 % desde 2010) y la India del 8 % (el doble desde 2010). Las emisiones de Rusia y Brasil han aumentado a un ritmo más lento (17 % y 16 %, respectivamente) desde 2010. Mientras tanto, las emisiones de América del Norte y Europa han ido disminuyendo (11 % y 22 %, respectivamente, desde 2010), al igual que las de Australia (10 %) y Japón (18 %). Las emisiones de América Latina se han mantenido estables (del 1 % al 4 % de las emisiones globales), mientras que las de Oriente Medio y África han aumentado (un 31 % y un 16 %, respectivamente; el 6 % y el 4 % de las emisiones globales).